Cuando se consigue una victoria tan holgada se suele caer en los tópicos de que el equipo rival no estuvo a la altura. Pero aún recuerdo cuando nosotros estábamos del otro lado y también sufrimos las embestidas del contrario. Todo es fruto de horas de trabajo y entretenimiento, esa suele ser la diferencia entre unos equipos y otros.

En este sentido en nuestro encuentro contra el Club Voleibol Pacense hicimos valer una de nuestras principales armas, el saque, el cual nos hizo llevar siempre de cara el partido. Pero que nadie se confunda que no fue todo así, sino que en muchas fases del encuentro tuvimos que hacer uso de otras armas que día a día vamos consiguiendo, una buena defensa, un gran ataque y una espectacular recepción. Además, hay que añadir el rigor táctico que este equipo tan joven está adquiriendo, propio de combinados más experimentados.

Y todo esto, tal y como ya comentaba anteriormente, solo es fruto de un trabajo y una dedicación diaria que tiene su reflejo posterior en el campo y hace parecer que se solventen partidos con esta aparente facilidad.

Ánimo chicas, aún nos queda mucho, pero este es el camino.

1,2,1,2,3... Lacimurga OEEEEE